Gaspard Robert (1722-1799) era hijo de una nieta de Joseph Clérissy, propietario de la primera fábrica de cerámica de Marsella. Desde muy joven trabajó en el taller de su padrastro, André Estieu, hasta que creó su propio taller en el mismo distrito en 1753. Allí desarrolló su propia producción de loza en la que colaboraron un gran número de aprendices. Era una mano de obra barata, pero de calidad, ya que la mayoría de los artistas se habían formado en la Academia de Bellas Artes. En 1767 consiguió la autorización que le permitió fabricar porcelana en su taller, por lo que se convirtió en el único especialista de porcelana de Marsella. Como reconocimiento, el 2 de julio de 1777 recibió la visita del conde de Provenza, futuro Luis XVIII y en 1789 fue elegido diputado del Tercer Estado en representación de los ceramistas.  En la decoración utilizó principalmente el claroscuro color sepia, verde o rosa, los motivos vegetales y los paisajes policromos. Como se hacía habitualmente en la decoración de la porcelana, Robert aplicaba asiduamente ornamentos dorados que combinaba con la policromía.  

Estilísticamente este aguamanil aporta motivos de época rococó derivados de la rocalla, que eran habituales en los talleres de Marsella. De forma oblonga, presenta aplicaciones de volutas en relieve que configuran cenefas en la parte superior e inferior del receptáculo, así como en las asas laterales acabadas en forma de ave. La boca donde se inserta el grifo para la salida de líquidos está también rodeada de una voluta. La tapa está configurada a base de ornamentos de voluta en relieve y pomo en forma de frutos. La ornamentación pictórica en claroscuro azul es íntegramente oriental. Reproduce un jardín con crisantemos y almendros dispuestos en una elegante asimetría, característica en la porcelana oriental.